Velo de este modo.
Cualquiera puede poner lo mejor de sí cuando está de buen ánimo... durante sus interpretaciones. Es una cuestion de
voluntad y energía. En las ciencias herméticas (como el tarot)... el ejecutante (tarotista) dedica una buena parte de su tiempo
en aprender a manejar las corrientes energéticas de circundan su cuerpo para así poder canalizar sus distintos estados anímicos
de manera constructiva.
Quién está triste, desanimado o melancólico tendera a disminuir sus niveles de energía y voluntad para hacer lo que sea
(no solo leer el tarot).
Sin embargo, hay que tener presente, que desde el día que decides estudiar tarot, tu función será precisamente
ser el orientador y consejero de personas que generalmente recurrirán a tí en medio de períodos de mucho estrés, ansiedad, desengaños
y dramas de todo tipo. Por tant0, resulta imperativo que te entrenes a ti mism@ para ser una persona fuerte y entera, de lo contrario la falta de vocación te convertirá en un 'ciego guiando ciegos'.
Una diferencia sustancial entre el maestro y el amateur radica precisamente en que el primero se sobrepone a sus
contratiempos personales mientras que el segundo depende casi totalmente de estar inspirad@.
Saber, atrevernos, poder y mantener silencio son cinco virtudes indispensables
que todo practicante de las artes esotéricas debe cultivar. Saber como interpretar,
atrevernos a llegar hacia donde nos dirija la lectura tener la voluntad que nos ayude
a encontrar una respuesta y finalmente... callar y dejar que el consultante siga su camino.
Tu pregunta se refiere a 'poder'.
Somos seres humanos. La experiencia humana inevitablemente nos acarrea dolor y sufrimiento, es verdad. Y es por eso
que debemos ser sinceros con nosotros mismos y plantearnos si realmente queremos utilizar esta herramienta maravillosa
cuando sea necesario o solamente cuando se nos de la gana.
Excelente tema.
Mis mejores deseos