05-03-2020, 23:44 PM
[23:55, 29/7/2019] YY: Sueña
[23:55, 29/7/2019] YY : Y vuélveme a besar antes de que se acabe el verano
[23:55, 29/7/2019] XX: ¿Cuando acaba el verano?
[23:56, 29/7/2019] XX : Y porque el verano
[23:56, 29/7/2019] XX: Porque no antes de esta semana
[23:56, 29/7/2019] XX : O porque no antes de este dia
[23:56, 29/7/2019] XX : Sueña.
Escribo mucho, más que mucho. Lo físico es emocionante, el papel es moldeable, la tinta, un devenir. Pienso en lo rudimentario, algo añadido del pasado, no precisamente un desarrollo precario e imperfecto, solo algo tangible, moldeable y físico.
Lo visible y lo tocable, es para mí, y es en
silencio.
Luego existe otro mundo, en el también develo palabras, las que no pueden parar y se escapan. Las que a veces tienen caras y formas distorsionadas; estas se ven, se comparten y se viralizan, a una corta distancia del click.
Un espacio, una propuesta, un statement, con significados y significantes. Las palabras y las posibilidades se tornan interminables, muchas no visibles y otras invencibles. Coexisten, cohabitan y se abrazan entre sí, mientras se transforman.
Nuestra interacción pareciese ahora vulnerada, porque los filtros solo se ponen en las fotos y no en las acciones más humanas. Las acciones también se toman desde la cama, cuando miras la pantalla de tu móvil y decides dejar marca de tu existencia.
Ya nada desaparece, después de ese existir, en este mundo en el que pareciese ser todo permanente. Así vivimos en cierta desesperación, como si el aire dentro de la navegación fuera reducido, y nuestras capacidades dentro del espacio fueran tan ilimitadas que surge un descontrol exacerbado, ante el ferviente deseo de consumirnos.
La mente arde de necesidades e impulsos, ese arder esta en casi todo, todo lo que no podemos ver, porque estamos y no estamos a la vez. Te veo pero no te tengo, porque estas en un espacio y tiempo irreconocible, razón de la furia y las ansias, hacia las cosas que aún no se logran comprender. Por eso el devorar y luego el construir, desde la nada.
Existe el cambio, total cambio. La gente le tiene miedo a los cambios, también a lo desconocido, a lo leve y a lo invisible. Lo extraño es tan extraño porque lo hacemos así. Nada es tan trágico cuando te das cuenta que todo siempre lo es, al final en este mundo existen oportunidades y el espacio lo hacemos nosotros.
El límite no es límite, al menos aquí, no sé. Este instante es abismal, aterrante. Esto donde escribo ya no es papel, es esto, como tú le llames, donde tú lo leas, como tú lo recibas y lo quieras entender.
Es eso que ya es presente y que devoraremos en futuro.
Yaya.
[23:55, 29/7/2019] YY : Y vuélveme a besar antes de que se acabe el verano
[23:55, 29/7/2019] XX: ¿Cuando acaba el verano?
[23:56, 29/7/2019] XX : Y porque el verano
[23:56, 29/7/2019] XX: Porque no antes de esta semana
[23:56, 29/7/2019] XX : O porque no antes de este dia
[23:56, 29/7/2019] XX : Sueña.
Escribo mucho, más que mucho. Lo físico es emocionante, el papel es moldeable, la tinta, un devenir. Pienso en lo rudimentario, algo añadido del pasado, no precisamente un desarrollo precario e imperfecto, solo algo tangible, moldeable y físico.
Lo visible y lo tocable, es para mí, y es en
silencio.
Luego existe otro mundo, en el también develo palabras, las que no pueden parar y se escapan. Las que a veces tienen caras y formas distorsionadas; estas se ven, se comparten y se viralizan, a una corta distancia del click.
Un espacio, una propuesta, un statement, con significados y significantes. Las palabras y las posibilidades se tornan interminables, muchas no visibles y otras invencibles. Coexisten, cohabitan y se abrazan entre sí, mientras se transforman.
Nuestra interacción pareciese ahora vulnerada, porque los filtros solo se ponen en las fotos y no en las acciones más humanas. Las acciones también se toman desde la cama, cuando miras la pantalla de tu móvil y decides dejar marca de tu existencia.
Ya nada desaparece, después de ese existir, en este mundo en el que pareciese ser todo permanente. Así vivimos en cierta desesperación, como si el aire dentro de la navegación fuera reducido, y nuestras capacidades dentro del espacio fueran tan ilimitadas que surge un descontrol exacerbado, ante el ferviente deseo de consumirnos.
La mente arde de necesidades e impulsos, ese arder esta en casi todo, todo lo que no podemos ver, porque estamos y no estamos a la vez. Te veo pero no te tengo, porque estas en un espacio y tiempo irreconocible, razón de la furia y las ansias, hacia las cosas que aún no se logran comprender. Por eso el devorar y luego el construir, desde la nada.
Existe el cambio, total cambio. La gente le tiene miedo a los cambios, también a lo desconocido, a lo leve y a lo invisible. Lo extraño es tan extraño porque lo hacemos así. Nada es tan trágico cuando te das cuenta que todo siempre lo es, al final en este mundo existen oportunidades y el espacio lo hacemos nosotros.
El límite no es límite, al menos aquí, no sé. Este instante es abismal, aterrante. Esto donde escribo ya no es papel, es esto, como tú le llames, donde tú lo leas, como tú lo recibas y lo quieras entender.
Es eso que ya es presente y que devoraremos en futuro.
Yaya.
