El título de este tema hace referencia al nombre de un documental que he visto en dónde James Randi, ilusionista, mago y escéptico se dedica a desenmascarar a personas que dicen tener poderes sobrenaturales ya sea para doblar cucharas o adivinar lo que le sucede a otros. Incluso se incluye una curiosa prueba para ver cómo la astrología está sujeta a engaños a través del Efecto Forer, tema que traté también en este artículo: https://aquariantarot.blogspot.com.es/20...eting.html
Hay partes del documental realmente cómicas y otras que dan vergüenza ajena al ver cómo algunas personas utilizan trucos para hacer creer que tienen algún poder especial, algo en lo que James Randi y yo estamos de acuerdo: el problema de fondo y que abunda en el mundo esotérico no es la gente de buena fe que cree en ciertas cosas y se mueve en su propio mundo mágico o espiritual sin incordiar a nadie, el problema real son aquellos que sabiendo que no tienen poderes ni nada utilizan estos temas para llevar a cabo engaños flagrantes contra otras personas. Un ejemplo de esto último y que podemos ver en el documental es el caso del reverendo evangelista Peter Popoff, que hacía creer a sus seguidores que podía curar el cáncer o levantar a paralíticos de su silla de ruedas con la colaboración del poder divino. Y no se quedaba ahí, el reverendo era capaz además de adivinar las dolencias de las personas sin preguntarles nada e incluso saber el nombre de sus familiares. Lo que por supuesto no era verdad. Popoff ni curaba ni adivinaba ya que se descubrió entre otras cosas que utilizaba a colaboradores que se hacían pasar por enfermos en cada sitio en dónde estaba y su mujer a través de una señal de radio conectaba con un pinganillo en la oreja de Popoff y le comunicaba datos de las personas con las cuales interactuaba y que antes habían entregado información sobre ellas al entrar al sitio . Es decir, el hombre tenía todo calculado y con una jeta que se la pisaba hacía creer a las personas con su fervor religioso que él era el canalizador de estos prodigios cuando no era más que una serie de trucos en dónde incluso la tecnología estaba involucrada.
Estos son apenas unos botones de muestra pero el documental abunda en ejemplos en donde también se incluye a un quiromante (lector de manos) que reconoce abiertamente como se inventaba ciertas descripciones que las personas intentaban ajustar complacientemente a su vida. El caso de los quiromantes también es aplicable a tarotistas, videntes e incluso astrólogos que caen en esta actitud de hacer creer a otros que aquello que hacen es producto de "poderes especiales" cuando en realidad y como lo he tratado también en otros artículos se justifica completamente si nos remitimos a los procesos cognitivos como la Teoría de la Mente y todas esas capacidades naturales que todos tenemos y que nos permiten predecir o describir a otros. Y aquí pasa lo mismo que con lo de Popoff, el problema no es quien usa estos métodos, el problema ocurre cuando quienes los aplican se autoproclaman magos supremos, brujos increíbles con el único motivo de enganchar aún más a las personas, haciéndoles creer tienen poderes cuando en realidad no son más distintos que cualquier otra persona de a pie.
Para darle de comer aparte es el crecimiento de la Medicina Alternativa en Rusia en dónde centros médicos completos prometen curar dolencias físicas con jarrones llenos de agua repartidos por todos lados o con los cómicos movimientos de un tío que concentrado y haciendo movimientos que parecen de Kung-Fu intenta alterar la química corporal de un enfermo recostado en una camilla (minuto 39:31). Y así, se pasan volando los 54 minutos y pico del documental en dónde yo me quedo con una sensación de responsabilidad inmensa al darme cuenta como metido en este mundo que parece tan mágico es también muy importante poner un poco de intelecto y sano escepticismo para proteger a la gente que sin esta información puede caer en las trampas muy bien elaboradas de estafadores. Comparto aquí abajo el documental, recomendable y que no tiene desperdicio.
Puedes leer el articulo completo con sus respectivas imágenes aquí: https://aquariantarot.blogspot.com.es/20...os_23.html
Hay partes del documental realmente cómicas y otras que dan vergüenza ajena al ver cómo algunas personas utilizan trucos para hacer creer que tienen algún poder especial, algo en lo que James Randi y yo estamos de acuerdo: el problema de fondo y que abunda en el mundo esotérico no es la gente de buena fe que cree en ciertas cosas y se mueve en su propio mundo mágico o espiritual sin incordiar a nadie, el problema real son aquellos que sabiendo que no tienen poderes ni nada utilizan estos temas para llevar a cabo engaños flagrantes contra otras personas. Un ejemplo de esto último y que podemos ver en el documental es el caso del reverendo evangelista Peter Popoff, que hacía creer a sus seguidores que podía curar el cáncer o levantar a paralíticos de su silla de ruedas con la colaboración del poder divino. Y no se quedaba ahí, el reverendo era capaz además de adivinar las dolencias de las personas sin preguntarles nada e incluso saber el nombre de sus familiares. Lo que por supuesto no era verdad. Popoff ni curaba ni adivinaba ya que se descubrió entre otras cosas que utilizaba a colaboradores que se hacían pasar por enfermos en cada sitio en dónde estaba y su mujer a través de una señal de radio conectaba con un pinganillo en la oreja de Popoff y le comunicaba datos de las personas con las cuales interactuaba y que antes habían entregado información sobre ellas al entrar al sitio . Es decir, el hombre tenía todo calculado y con una jeta que se la pisaba hacía creer a las personas con su fervor religioso que él era el canalizador de estos prodigios cuando no era más que una serie de trucos en dónde incluso la tecnología estaba involucrada.
Estos son apenas unos botones de muestra pero el documental abunda en ejemplos en donde también se incluye a un quiromante (lector de manos) que reconoce abiertamente como se inventaba ciertas descripciones que las personas intentaban ajustar complacientemente a su vida. El caso de los quiromantes también es aplicable a tarotistas, videntes e incluso astrólogos que caen en esta actitud de hacer creer a otros que aquello que hacen es producto de "poderes especiales" cuando en realidad y como lo he tratado también en otros artículos se justifica completamente si nos remitimos a los procesos cognitivos como la Teoría de la Mente y todas esas capacidades naturales que todos tenemos y que nos permiten predecir o describir a otros. Y aquí pasa lo mismo que con lo de Popoff, el problema no es quien usa estos métodos, el problema ocurre cuando quienes los aplican se autoproclaman magos supremos, brujos increíbles con el único motivo de enganchar aún más a las personas, haciéndoles creer tienen poderes cuando en realidad no son más distintos que cualquier otra persona de a pie.
Para darle de comer aparte es el crecimiento de la Medicina Alternativa en Rusia en dónde centros médicos completos prometen curar dolencias físicas con jarrones llenos de agua repartidos por todos lados o con los cómicos movimientos de un tío que concentrado y haciendo movimientos que parecen de Kung-Fu intenta alterar la química corporal de un enfermo recostado en una camilla (minuto 39:31). Y así, se pasan volando los 54 minutos y pico del documental en dónde yo me quedo con una sensación de responsabilidad inmensa al darme cuenta como metido en este mundo que parece tan mágico es también muy importante poner un poco de intelecto y sano escepticismo para proteger a la gente que sin esta información puede caer en las trampas muy bien elaboradas de estafadores. Comparto aquí abajo el documental, recomendable y que no tiene desperdicio.
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